Afecta
a electores de
Carabobo, Distrito Capital, Miranda, Lara,
Táchira y Zulia
CON MANIPULACIÓN DE CIRCUNSCRIPCIONES
SE
PRETENDE ALTERAR LA VOLUNTAD DEL PUEBLO
(Caracas, 20 de enero 2010 / Nota de Prensa
Súmate 314) -
De los ocho
estados cuyas circunscripciones sufrieron
cambios, Súmate solicita al directorio del
Consejo Nacional Electoral explicar al país
especialmente cuáles fueron los criterios
técnicos que condujeron a la modificación
correspondiente a seis de ellos (Carabobo,
Distrito Capital, Lara, Miranda, Táchira y
Zulia), que concentran el 50,53 por ciento
de la población electoral y eligen a 63
diputados.
Esta
organización ciudadana desmiente la
afirmación de la presidenta del CNE Tibisay
Lucena, al decir que se habían respetado los
criterios utilizados en el pasado para la
conformación de estas áreas geográficas
electorales, entre ellos el de tradición
electoral y los principios fundamentales de
equilibrio, equidad y justicia electoral
(principio de legalidad); y el de similitud
en la continuidad geográfica, económica,
social y cultural (principio de
homogeneidad); cuando en realidad produjeron
cambios profundos en las circunscripciones
de los estados del país que tradicionalmente
han sido adversos al oficialismo, que como
resultado de un análisis exhaustivo, se
concluye que pretende restarle
representación en el parlamento a la mayoría
democrática del país.
Como ejemplo
de esta manipulación en la conformación de
las circunscripciones está el caso del
Distrito Capital, que ahora tendrá cinco
circunscripciones con derecho a elegir siete
diputados nominales. En este caso
particular, de acuerdo a esta organización
con experticia en materia electoral, hay
varios cambios que pudieran afectar los
resultados de los sectores que adversan al
gobierno nacional. Uno de ellos es la
eliminación de la circunscripción que
conformaban las parroquias El Paraíso y La
Vega, cuyos electores antes tenían el
derecho de elegir un diputado, para sumarlas
ahora a las parroquias Macarao, Antímano y
Caricuao, que en el pasado también
conformaban un circuito con un diputado; y
ahora la convierten en uno solo circuito con
derecho a dos diputados. De acuerdo con esta
organización, la opción partidista que
obtenga la mayoría simple de los votos
obtendrá estos dos curules en la Asamblea
Nacional. Súmate exige asimismo al CNE
explicar las razones por las que dividió a
las parroquias Sucre y 23 de Enero, que en
el pasado conformaban una sola
circunscripción, en dos nuevos circuitos,
con la suma de otras parroquias para cada
una de ellas.
Dentro del
estado Miranda destaca también el caso de
los municipios Chacao, Baruta y El Hatillo,
que anteriormente formaban una unidad
geográfica electoral, pero que en la nueva
conformación le fue anexada la parroquia
Leoncio Martínez, separándola del Municipio
Sucre. Aquí también queda demostrado que se
pretende unir el voto opuesto al gobierno
nacional, y restárselo a la parroquia
Petare.
Llama la
atención la forma como fue fragmentado el
municipio Sucre, en el que la parroquia
Petare forma ahora una sola circunscripción,
con derecho a elegir un diputado; mientras
las parroquias Caucagüita, La Dolorita y
Filas de Mariches de esta misma localidad
municipal fueron unidas a los municipios
Plaza y Zamora para escoger otros dos
diputados, donde el análisis de los
resultados históricos es favorable al
oficialismo.
Otro caso que
demuestra la manipulación fue la división de
las circunscripciones en el estado Zulia. El
municipio Maracaibo pasó a estar conformado
por cinco circunscripciones para elegir
igual número de diputados nominales, cuando
hasta ahora formaba una sola entidad
electoral que elegía cuatro diputados.
En los estados
Carabobo y Lara los cambios buscan agrupar
en una circunscripción votos que
tradicionalmente han sido opuestos al
oficialismo. En Carabobo se conformó una
circunscripción con los municipios
Naguanagua, San Diego y las parroquias San
José, El Socorro, Candelaria y San Blas del
norte del municipio Valencia. En Lara se
desmembró el municipio Iribarren, de manera
de agrupar las parroquias Catedral y Santa
Rosa con los municipios Palavecino y Simón
Planas.
La
manipulación de las principales
circunscripciones electorales, en la que
resalta la agrupación discrecional de
municipios con parroquias, fue justamente
una de las irregularidades denunciadas por
Súmate sobre la inconstitucional Ley de
Procesos Electorales aprobada por la
Asamblea Nacional el año pasado; además del
diferimiento de las elecciones de Concejos
Municipales y Juntas Parroquiales y el
nombramiento de dos rectores y sus cuatro
suplentes sin cumplir con el requisito
fundamental de no estar vinculados con
ningún partido; son muestras de cómo el
gobierno continúa intentando aplicar el
ventajismo y la instauración de un diseño
electoral parcializado y poco transparente.
Sin embargo,
estos nuevos obstáculos, violaciones e
irregularidades exigen que los venezolanos
asumamos como indispensable la creación de
una plataforma de vigilancia electoral como
nunca ha existido antes, ya que contar con
la mayoría del electorado deberá
complementarse con la organización y el
desarrollo de una estrategia unitaria para
que la votación masiva esté acompañada de
una eficaz defensa del voto.